Hola, putero

Según la APRAMP, 4 de cada 10 hombres han pagado por sexo

España es el país de la Unión Europea con mayor consumo de la prostitución  

Es la campaña de concienciación #HolaPutero, planteada con un mensaje en video directo al consumidor de prostitutas, un puñetazo directo a la hipocresía de autoestablecerse el derecho a comprar el sexo de la mujer.

La periodista Teresa Lozano y la actriz Zúa Méndez forman Towanda Rebels, cuya acción reside en canales y redes sociales con formato audiovisual (Youtube) para denunciar el machismo además de tratar actualidad y humor feminista. En el video, de mayor repercusión sin perder de vista sus otras piezas, apunta directo a la pavorosa normalidad con la que la esclavitud sexual se ha anclado con sociedades con la levedad de ser llamada 'trabajo sexual', entendiendo el negocio como hombres que pagan un servicio, en lugar de hablar de hombres que pagan por violar a mujeres que están sometidas a una situación de explotación, violencia y verdadera marginación social, bien por voluntad propia ante una grave situación económica o bien como prisioneras de mafias y trata de blancas (esto último, siempre va unido a la prostitución).

Por qué al putero

El mensaje es un dardo directo a los puteros, llamémosle por su nombre. Sin complejos. Pero ¿por qué no a las prostitutas presionándolas para que no lo hagan? ¿Por qué no a las mafias ya las tratas de blanca?

Presionar a una persona en un estado de desamparo social y económico absoluto para que no cometa el error de poner en venta su cuerpo y su dignidad de mujer, no es lo más inteligente ni lo más práctico que puedes hacer dadas las necesidades de una persona que está agotando los últimos recursos de salida y en una situación en la que ya ha determinado hacer lo que sea necesario para salir adelante con tal de subsistir, no solo por ellas mismas, sino por ejemplo, pongamos el caso de que tenga que sacar adelante a una cría o un crío. Por otro lado, una gran parte de las mujeres inmersas en la prostitución no la eligieron, sino que fueron sometidas. Es decir, son víctimas engañadas de una esclavitud que las obliga de forma violenta tanto a tener sexo con los clientes como a sonreír con ellos para insinuar que están en ese oficio por puro vicio y elección propia. Toda una falsedad.

"Putero, no te la has follado, la has violado"

Los entresijos de las mafias y su trata de blancas mueve millones de euros anuales cuyos maletines llegan hasta los despachos de altas esferas que tocan lo administrativo y gubernamental. Deja un dineral enorme y se cose el silencio con una pasividad asombrosa. Millonarios, empresarios, banqueros, políticos y un buen puñado de gente con roles de apariencia insospechable pagan fiestas, cierran negocios, acomodan viajes de inversores consumiendo prostitución. No es complicado entender que ante una mafia de tal envergadura no sirven de mucho mensajes lanzados desde un canal de Youtube. Esto se combate con leyes y acciones policiales. Pero visto lo visto, ¿quién custodia a los custodios?

"Esto no es sexo, es poder"

El negocio existe porque existen los clientes. En este mundo que vive de manera sobrevencida en leyes de mercantilización, nadie emprende un negocio de dudosa ni escasa rentabilidad. El clientelismo consumidor de la prostitución erradicado hasta la inexistencia anularía la actividad delictiva de esas mafias, que no verían inversión ni rentabilidad en un entramado de maletines, secuestros y locales de mala muerte para negocios de esta calaña. Y desde una posición combativa se estaría evitando el mercadeo discriminatorio e infrahumano de la mujer.

Dentro video.