Viejunos
Por R. Palomeque // Follow @Palomiujsimpson
Dice la canción de Celtas Cortos “A veces llega el momento en que te haces viejo de repente”. Hay a quien le pasa esto por primera vez cuando unos chiquillos te dicen “-Señor, nos echa el balón”. Otros se percatan cuando ven que tienen más pelo en la almohada o en el cepillo que sobre la cabeza, o cuando se te caen 50 céntimos y no los recoges porque el nolotil para el dolor de después cuesta más.
Todo esto no es preocupante, de hecho hay diversos estudios de alguna de la universidad de Sin City que demuestran que en ese preciso momento alcanzamos la madurez absoluta, el culmen. Te esperan años relajados ahora que dejas de pensar que eres un chavalín.
Dicho todo esto ¿de verdad pensáis que ese es el momento en el que tienes que preocuparte de que os estáis haciendo viejunos? Con permiso: UN MOJÓN. En realidad, ese momento llega de verdad el día que estás en casa de tu colega y se da esta conversación:
Tú: -Quillo cambia la tele, no me pongas más videos de youtube.
Colega: -Venga vamos a ver una mierda comercial.
Tú: -¿Lo vas a dejar en algún canal? Ostia, Rambo! Déjala ahí.
(Silencio de 3 minutos)
Colega: -Vaya peliculón, vaya papelón que se marca el Stallone.
Tú: -Y tanto, pa que después digan que es mal actor.
(40 minutos más tarde)
Tu: -Tio, ¿te has dado cuenta que Stallone lleva sin hablar 40 minutos?
Colega: -Vaya mierda de película. Se me cae un mito.
Ahí, justo ahí es cuando te das cuenta que eres un viejuno. ¡¡Que las películas de Stallone, Van Damme y Schwarzenegger son las películas de indios de nuestros padres, tíos y abuelos!! ¿Os habéis dado cuenta? Estás rozando el límite, estás a punto de convertirte en un recorte de pandilla, el mundo se te cae a los pies. ¿Cómo me ha pasado esto?
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